La tatacoa y la guajira.
Durante el viaje por Colombia no alcanzamos alturas considerables ni pasamos por zonas extremadamente desérticas. Las excursiones de un día no suelen ser largas, por lo que hay suficiente tiempo y posibilidad de hacer paradas en el camino, tomar fotos o visitar pueblos.
Aproximadamente la mitad de la ruta transcurre por caminos de tierra. Debido a la sequía en esta región, algunos pasajes pueden ser un poco arenosos y polvorientos. Por lo tanto, se recomienda tener experiencia en offroad con suelo suelto. Un entrenamiento básico de off-road es muy útil como preparación. Esto se debe a que se aprende a manejar mejor la moto fuera de la carretera. Sin duda, aumentará el placer de la conducción. Las motos son enduros ligeras y manejables, perfectas para las carreteras sin asfaltar.
Algunas partes de la costa caribeña son muy pobres en lluvia debido al viento alisio. Aunque la costa del Caribe también tiene un clima tropical, el tiempo en general es mucho más seco que en otras partes de Colombia. Las estaciones secas extremas y las altas temperaturas se dan sobre todo en la península de la Guajira. Debido a su pertenencia a la zona climática tropical, las precipitaciones pueden producirse de forma esporádica, pero normalmente sólo durante un tiempo muy corto. La estación seca propiamente dicha se sitúa en los meses de enero, febrero y marzo, aquí no llueve casi nunca. Sin embargo, en los últimos años, debido al cambio de clima, tampoco hay prácticamente precipitaciones en noviembre y diciembre. Las temperaturas rondan los 30° Celsius durante todo el año, tanto en la estación seca como en la lluviosa. Esto significa que también hay días de calor extremo de hasta 38° Celsius. Esto debe tenerse en cuenta a la hora de elegir la ropa.
La guajira colombia
El desierto de la Tatacoa es la segunda zona árida más grande de Colombia después de la Península de la Guajira. Ocupa más de 330 kilómetros cuadrados. Se encuentra al norte del departamento del Huila, a 38 km de la ciudad de Neiva en Colombia y a 15 km de Natagaima en el Tolima. Es conocido por ser un rico yacimiento de fósiles y un destino turístico. El desierto de la Tatacoa tiene dos colores distintivos: ocre en la zona de Cuzco y gris en la zona de Los Hoyos.
La Tatacoa, o el Valle de los Dolores, como lo llamó en 1538 el conquistador Gonzalo Jiménez de Quesada, no es un desierto, sino un bosque seco tropical. El nombre “Tatacoa”, también dado por los españoles, hace referencia a sus serpientes de cascabel. Durante el periodo terciario era más húmedo, con miles de flores y árboles, pero se ha ido secando poco a poco hasta convertirse en una zona árida.
La Tatacoa abarca 330 kilómetros cuadrados alrededor de la ciudad de Villavieja. La zona está muy erosionada y atravesada por cañones secos que se desarrollan de forma transitoria en los meses de invierno. Estas formas se crean sobre superficies arcillosas, creando barrancos laberínticos en el paisaje que pueden alcanzar los 20 metros de profundidad.
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Sudamérica es un lugar único. Es un continente lleno de contrastes. En Sudamérica se pueden encontrar playas, montañas, valles, selvas, desiertos y picos nevados. Todo en el mismo lugar. Desde la Patagonia hasta La Guajira. Sudamérica es un continente que lo tiene todo entre el Pacífico y el Atlántico. Todos son bienvenidos a un lugar de escenarios y paisajes mágicos. Estos son los mayores desiertos de Sudamérica.
El mayor desierto de Argentina y el séptimo del mundo. Un lugar de pueblos antiguos y tribus indígenas. Un lugar habitado por dinosaurios hace más de 70 millones de años. A diferencia de lo que pueda pensar, es un lugar frío. En el desierto de la Patagonia Oriental, las temperaturas rara vez superan los 12 grados centígrados. Flora y fauna que sólo se pueden ver en este lugar. Un lugar de geografía única, con los imponentes Andes a un lado y el océano Atlántico al otro. En un viaje a la Patagonia argentina, seguramente disfrutará de este desierto, uno de los más grandes de Sudamérica.
El desierto de la guajira
Decidimos tomar un atajo y probablemente no fue la mejor idea que tuvimos… nos detuvimos en medio de la nada al lado de la carretera en Aipe y caminamos 30 minutos bajo 35 grados con nuestras grandes mochilas para encontrar un bote para cruzar el río y luego 10 minutos para encontrar un tuktuk que nos llevara a Tatacoa. Yo ya no me sentía bien debido a un resfriado cogido en Mongui, esto claramente me destrozó y durante los siguientes 3 días tuve que soportar una temperatura de 40 grados…
Nos alojamos en el desierto en una pequeña cabaña con electricidad sólo 3 horas por noche y una opción limitada de almuerzo / cena. ¡Básico pero limpio y con una ducha ! Nos acostumbramos a la comodidad mínima en 6 meses 🙂
Teniendo en cuenta que hacía mucho calor y que no me sentía bien tomamos un tour en tuktuk con otros mochileros para ir al gris llamado los Hoyos. Este desierto creció hace millones de años cuando el océano desapareció. hasta hace 500 años, el valle era todavía húmedo pero sufrió una fuerte erosión y se ha secado. Primera parada, un mirador donde vimos piedras con formas de gallina, dragón, tortuga y cocodrilo. Florie encontró un hueso, ¡qué miedo!